Sin juzgarse a uno mismo, gracias.
El peor juez que puede haber de nuestros actos somos nosotros mismos; juzgarse a uno mismo suele ser una estrategia perdedora ya desde el inicio…
Seguir leyendo
El peor juez que puede haber de nuestros actos somos nosotros mismos; juzgarse a uno mismo suele ser una estrategia perdedora ya desde el inicio…