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El liderazgo está de moda, tanto que nos gusta ponernos esa etiqueta, autoproclamarnos líderes de un equipo sube nuestra autoestima y autoeficacia, nos sentimos más capaces. Sin embargo como ocurre con todas las palabras de moda (neuromarketing, coaching, startup y un largo etcétera), se suele aprovechar para meter en el saco mucho más de lo que le pertenece.
Uno se da cuenta de que una buena parte del liderazgo que vivimos en nuestras empresas es todavía del siglo pasado, pertenece a otra sociedad, a otras reglas, a otros modelos de gestión de personas y proyectos. En ese saco, el del liderazgo, nos encontramos de todo, líderes, jefes y… psicópatas. Se dice que un 3,9% de los profesionales que trabajan en corporaciones tienen tendencias psicóticas, un dato mayor que el que se encuentra en el resto de la población.
Aunque te suene a chiste, te aseguro que no es broma, muchas de nuestras empresas están dirigidas por auténticos comportamientos psicóticos.
¿Cuál es la diferencia entre líderes, jefes y psicópatas?
- El líder es una con un comportamiento responsable, maduro y sensible, capaz de inspirar a otros. Sabe cómo dirigir personas y sabe qué errores no debe cometer. Es consciente de que la motivación y resultados de su equipo dependen ampliamente de él, por lo que pone en práctica estrategias, habilidades y comportamientos que facilitan el desarrollo del equipo. El líder no busca protagonismo, su ego está tranquilo, no necesita agrandarlo. La mayor parte del tiempo, los líderes se ponen al servicio de su equipo. Lideran utilizando el sentido común.
- El jefe es una persona orientada a la gestión, su función es conseguir que las cosas funcionen (personas y procesos son «cosas» para el jefe), pero no es capaz de sembrar inspiración y motivación en los demás. Pide y exige resultados, pero los resultados nunca llegan a ser los deseados porque el equipo no se siente lo suficientemente implicado. Su carácter no invita a sentirse mejor cuando uno está con él/ella.
- El psicópata sufre una patología, quizás no la sufra hasta el extremo de llegar a medicarse (tampoco estaría bien visto), pero su comportamiento es excesivo en algún término, quizás esté excesivamente obsesionado con algo (obsesivo-compulsivo), quizás busque demasiado protagonismo (narcisista), quizás sea un líder excesivamente parternalista, quizás sufra estados de euforia y depresión continuos (transtorno bipolar), o ese tipo de líderes que te hacen sentir muy bien y luego sentir culpable haciéndose las víctimas…Un problema añadido de los líderes psicópatas es que se creen grandes líderes.
No nombraré a ninguna empresa, pero hay unos cuántos de estos líderes a nuestro alrededor. Conozco varios, sus consecuencias suelen ser desastrosas a la larga, aunque en el corto plazo parecen extraordinarios (tienen esa cualidad de seducirte de algún modo). Conozco una empresa bastante relevante, con más de 500 empleados, en la que el 33% de la plantilla se medica contra la ansiedad, el estrés y la tensión que hay en el puesto de trabajo. Es lo que tiene tener un «líder» de este tipo. Lo peor de los psicópatas es que los confundes, los crees líderes al principio, jefes después, hasta que más tarde se les cae la máscara.
Es fina la línea que separa cada uno de estos tres términos. De líder a jefe hay un sólo paso, de jefe a psicópata también. Espero que este post te ayude a identificarlos.
¿Qué experiencias de este tipo has tenido?
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