Esta semana está siendo de vértigo, no supone un desafío especial o reto intelectual importante, pero sí la dedicación de un número de horas considerable. Para mañana viernes por la noche habré trabajado un total de 60-65 horas, es decir 12-14 diarias. Es lo que tienen algunas épocas en mi trabajo, no me quejo, las asumo como un regalo. Uno aprende con el tiempo, que hay que saber aceptar las dificultades como retos, como desafíos que expanden su capacidad. Esta mañana, reflexiono unos minutos sobre los obstáculos y difucultades que nos encontramos en el camino…
Lo primero que uno se pregunta sobre los obstáculos es ¿Sirven para algo? ¿Cuál es el motivo de su existencia? He aprendido con el paso del tiempo, que su significado es muy profundo, mucho más de lo que imaginamos.
Por lo general, los obstáculos que la vida nos pone delante no son sino oportunidades para ser mejores, para desarrollar nuestras cualidades dormidas.
Aquí reside la diferencia entre personas que pese a las dificultades se ven felices, y aquellas que caminan con la cabeza agachada día tras día. ¿Qué haces cuando la vida te planta un obstáculo delante?, ¿Qué palabras te repites a ti mismo/a?
Ser más capaces de superar los obstáculos
Me gustó mucho el ejemplo que leí en el libro «El Arte de lo Posible» de Benjamin Zander, y de su costumbre de decirse a sí mismo «¡Apasionante!» ante las dificultades que va encontrando en su trabajo como Director de la Orquesta Filarmónica de Boston.
Aprender de los obstáculos es una tarea que, por lo general, no se nos ha enseñado, la debemos aprender con el discurrir de la vida.
Las dificultades nos ponen a prueba, nos enseñan, nos dibujan de nuevo, nos hacen desarrollar nuevas cualidades, nos despiertan talentos dormidos…
Dicen que no es bueno sufrir, pero sí que viene bien el haber sufrido.
Quizás sea porque cuando uno ha pasado por dificultades y obstáculos aprecia con mucha mayor claridad el color y el tono de la vida. Es como si uno fuera más capaz de percibir con sencillez y humildad como cualquier pequeña muestra de vida, es un milagro en sí misma, como la vida no puede ser sino maravillosa.
Desconfía de lo que sea demasiado fácil, no aprenderás….
O mejor todavía, desconfía de lo que sea demasiado fácil, porque quizás no hayas sido suficientemente realista y la cosa se complique más de lo que imaginas. Esta no es una mirada pesimista hacia la vida, es una mirada más realista. No se trata de pelearse con las dificultades, sino de aceptarlas. Algo así como, «Esto va a ser complicado, lo sé. Ahora voy a hacerlo lo mejor que pueda».
Casi todo tiende a complicarse, mucho más de lo que habías imaginado. ¿Por qué no aceptarlo? ¿Por qué no asumir ya desde el principio que la vida viene con obstáculos?
En fin, reflexiones de un jueves que quería compartir contigo.
Que tengas un gran día (y que sea apasionante!)
12 comentarios en “Es tan difícil aprender de los obstáculos…”
Además de «… tropezar varias veces en la misma piedra…», las barreras, los obstáculos superados son como vacunas para la próxima, te van curtiendo y como el entrenamiento deportivo cuando exite supercompensación, te permiten nuevos estímulos, y si los superas creces y todo este «machaque» es válido para cualquier escenario tanto profesional como personal @josantero
Hola José Joaquín, gracias por aportar y construir! un fuerte abrazo
Hola Cesar. Un gusto saludarte de nuevo. A veces pienso que los obstáculos son puestos por nosotros mismos. O, permitimos que lo coloquen. Un abrazo. Juan Manuel Pereira
Vaya que sí Juan Manuel! Cometemos autosabotaje como vellacos! un abrazo
Siempre he dicho que la crisis es un «gran y magnifíco master» el único problema es que cuesta mucho dinero.
Totalmente de acuerdo con tus comentarios Cesar
Gracias Juan! Un fuerte abrazo.
Hola César,
No sabes la razon que tienes,
Comparto tus palabras al milimetro. Gracias y un saludo!
Gracias Àngel, me alegra que estemos en esa sintonía. Un fuerte abrazo
Este artículo me llega en el justo momento para ser leído.
Gracias César! 🙂
Oh! Me alegra Mireia, ya me contarás! 😉
Gracias César!! Precisamente esta reflexión me llega en una semana llena de complicaciones en el camino hacia mis objetivos. Leerte me aporta nueva perspectiva y energía!!
Me alegra mucho Rebeca, a por esos objetivos!